Hay evidencia que la desinformación es más desenfrenada en las elecciones de este año que fue en 2016.
Los usuarios de Facebook están compartiendo, comentando, y haciendo clic en el botón “me gusta” en posts de fuentes cuestionables aproximadamente tres veces más ahora que en el último ciclo electoral, según un estudio reciente hecho por el German Marshall Fund Digital, un grupo de reflexión.
Varios informes indican que eses posts les pueden confundir, polarizar, y aún privar del derecho al voto a los ciudadanos. Y las analistas de seguridad se preocupan que con la probabilidad que se necesitará más tiempo para contar los votos este año, especialmente en los estados como Pensilvania, la desinformación tendrá más tiempo para propagar.
Reporteros de Politico, Univisión, NPR, y el New York Times están observando que la desinformación se está extendiendo a través de las comunidades latinas en Florida y otros estados, en la forma de “reclamos infundados y salvajes” sobre el coronavirus, Joe Biden, y Black Lives Matter.
Aquí tenemos 3 cosas para saber sobre la desinformación (y información errónea) durante las elecciones de 2020.
La información errónea y desinformación son dos cosas diferentes, pero se superponen.
La investigadora Claire Wardle es una cofundadora de First Draft News, una organización independiente que trabaja para fortificar las instituciones periodísticas y el público en combatir la información errónea, que ella defina como información falsa que es propagada por alguien que cree que es cierta.
Desinformación, ella escribió, es “deliberadamente falsa y designada a causar daño”. La gente que cree en y difunde la desinformación podría hacerlo para ganar dinero o poder político o para causar caos.
Once disinformation is unleashed on social media, however, users who believe and share it may unknowingly spread false information. Friends and family members who trust those users are more likely to trust the information.
Una vez que se desencadena la desinformación en las redes sociales, los usuarios que la creen y la comparten pueden divulgar la información falsa sin saberlo. Los familiares y amigos de estos usuarios son más propensas de confiar en la información compartida por las personas en que confían.
Wardle describe una categoría tercera, “la mal-información”, que es algo cierto pero diseminado para causar daño y no para servir los intereses del público.
Los materiales de First Draft empaquetan todos estos términos en un espectro de “desorden informativo”, que incluye las mentiras, las conspiraciones, y los rumores además que el “contenido hiper partidista” y las fotos, los videos, o los audios adulterados.
Algunas formas de la información errónea son sencillas… otros no.
Wardle divide la información errónea en siete tipos que abarcan desde el satiro, que no es creado para engañar aunque a veces lo hace, hasta el contenido que es completamente inventado e intentado de causar daño.
Mucha de la información errónea incluye algunas cosas que son ciertas y algunas cosas que son falsas, lo que la hace mucho más difícil de reconocer. Aquí hay algunas de las maneras en que la información errónea se ha propagado este año y en los ciclos electorales del pasado, con algunos consejos para identificarla.
Los posts que distorsionar el proceso de votar: Entre las advertencias, los posts, y las cuentas falsas que la Rusia usó para influir las elecciones de 2016, de acuerdo con la evidencia que las compañías tecnológicas le dieron al Congreso, hubo un post que le mandó a la gente a “evitar la fila” y tuitear su voto. Otros gráficos imitaron a la campaña de Hillary Clinton y promovieron que los ciudádanos votaran por texto. Un informe distinto sobre la campaña de desinformación de la Agencia de Investigación del Internet rusa descubrió que una de sus enfoques principales fue impulsarles a los votantes afroamericanos a boicotear las elecciones. Unas tácticas similares fueron dirigidos a los votantes de origen mexicano y las personas LGBTQ, en un grado menor. A los conservativos la agencia dirigió unos mensajes intentados a provocar la indignación, la división, y el apoyo al Trump, según el informe.
Otro engaño (este no atribuido a la interferencia de Rusia) mostró una foto falsa de la Inmigración y Control de Aduanas arrestando a las personas afuera del centro de votación. Propublica, que es una agencia de noticias sin fines de lucro, descubrió que se había insertado el agente de ICE y la persona detenida en una imagen de una elección previa. La cuenta que publicó la foto adulterada también fue falsa y sus otras actividades ya los han cubierto los medios. Los periodistas encontraron las imágenes originales con una búsqueda en Google, pero la idea fue suficiente insidiosa que el mismo rumor (todavía completamente falso) surgió de nuevo en 2018.
Consejos: Si tiene alguna pregunta sobre cómo votar, llame a la oficina electoral de su condado o visite su sitio web. También puede ir al sitio del departamento del estado de Pensilvania, o, si es el día de las elecciones, la línea directa, 1-877-868-3772. Una coalición de abogados y grupos de derechos cívicos también aceptan las llamadas de los votantes que se encuentran con problemas o preguntas. La puede llamar con varias líneas directas para hablantes de inglés, árabe, español, e idiomas de Asia. Para español, marque 1-888-VE-Y-VOTA. También puede consultar la página de las elecciones de WITF para información sobre la votación.
Los posts que promueven los reclamos falsos de frauda electoral: Este año, los ejemplos más prominentes de la información errónea tienen que ver con los balotes de correo, y Pensilvania es uno de los epicentros.
Propublica y First Draft analizó los posts de Facebook este mismo año y se dieron cuenta que la plataforma “está llena de reclamos falsos o engañosos sobre la votación, particularmente la votación por correo. Estos posts recibieron mayor participación entre el contenido que pertenece al voto. Incluye unas “teorías conspirativas del robo electoral o distorciones completas sobre la votación por correo dicho por Trump y medios conservativos prominentes. El informe describió unos reclamos de la izquierda y la derecha que sus oponentes robarán las elecciones.
Los investigadores de la seguridad cibernética se preocupan, sobre todo, que la desinformación que rodea los boletas del correo y el fraude electoral podrían comprometer las elecciones, especialmente si el recuento de votos dura más tiempo de lo usual. NPR habló con unos expertos que creen que “los actores malos” dentro de los EEUU podrían ser un riesgo más grave que la Rusia, que ya se han descubierto metiéndose en este ciclo electoral. Un grupo de investigadores de Harvard dijo que el uso de los medios por Trump, primariamente en las cadenas de televisión, es una fuente de desinformación más influyente que lo que pasa en las redes sociales.
Consejos: Recuerde que probablemente se necesitará más tiempo que lo usual para contar los votos y será más importante que nunca verificar cualquier reclamo de fraude o corrupción. Sólo hay dos sitios de chequeo de datos que publican en español y se enfocan en los acontecimientos de los EEUU. Son El Detector de Univisión y Tverifica de Telemundo. Están colaborando con otros medios en un nuevo chatbot disponible en WhatsApp. PolitiFact y Snopes son comprobadores de datos conocidos que se publican en inglés; hay varias organizaciones de todo el mundo que firmaron los principios de la red internacional contra la desinformación (IFCN).
Contenido adulterado o incorrectamente etiquetado: Los deepfakes, o clips de video o audio que usan la inteligencia artificial, no han sido la emergencia que algunos expertos temían.
Como relató NPR, la información errónea ha estado extendiéndose por medios menos avanzados y costosos. Incluye desde las fotos, videos, cuotas, y artículos sacados de sus contextos o mal-representados en las redes sociales hasta el contenido editado (como lo del agente de ICE puesto en una foto de un centro de votación) o titulares inventados.
Consejos: Tiene presente que los artículos, los memes, las fotos, y los videos que se comparten en las redes sociales podrían ser separados de su contexto original. Va a la fuente y después vea si puede verificar la información en otro lugar. Puede averiguar de dónde viene una foto con una busqueda reversa de las imágenes; los verificadores también son útiles para comprobar los posts virales. En cuanto a los deepfakes, puede aprender sobre los esfuerzos de detectarlos aquí.
Las cuentas falsas: Las campañas de desinformación cuentan con los bots, o las cuentas falsas, en parte para exacerbar las divisiones en sociedad.
Un ejemplo reciente: un grupo trabajando de combatir la desinformación en comunidades latinas descubrió que los bots estaban amplificando la controversia de Goya este verano, después de que el ejecutivo le elogió a Trump durante una visita a la Casa Blanca y los detractores del presidente promovieron un boicot. Twitter recientemente suspendió un grupo de cuentas falsas que estaban fingiéndose en ser afroamericanos que apoyaban al Trump. Las cuentas recogieron decenas de miles de seguidores en menos de una semana y en conjunto recibieron más de 265,000 retuits u otras “menciones amplificadores”.
Consejos: Tiene presente el fuente y lo cual motiva la creación y la transmisión de la información, especialmente cuando confirma su propia opinión. Varios estudios describen como la información errónea manipula nuestras preconcepciones y nuestra psicología. Por ejemplo, tendemos a creer los reclamos que vemos (o escuchamos) repetidamente, y frecuentemente supone que las cosas son ciertas si nadie las han corregido. Es más probable que creemos en algo que está alineado con nuestras creencias y más probable que compartimos la información que suscita la alegría, la rabia, el asombro, o la indignación.
Los sitios de “noticias” que están impulsada por una agenda: Grupos con unas agendas políticas o económicas a veces construyen los sitios donde publican información engañosa para promover sus intereses, usando el disfraz de un medio local de noticias y mezclando reportaje de otros fuentes para ganar la confianza de los leyentes. Estos sitios han proliferado en 2020. Aquí hay una lista de medios digitales que se debe tratar con escepticismo.
Consejos: Otro recurso que podría ser útil es una lista de Melissa Zimdars, una profesor asistente de comunicación en Merrimack College. Está formado de unos sitios de noticias sospechosas y unas maneras para reconocerlos. Las periodistas detrás de un herramiento llamado¿ News Guard evalúan los sitios con unos criterios de credibilidad y transparencia. Una abogada de nombre Vanessa Otero creó un “grafico de sesgo de medios”, para medir la tendencia política y fiabilidad de varias fuentes, aunque, como una periodista de medios escribe en Columbia Journalism Review, no es una ciencia perfecta.
Teorias conspirativas: Entre la pandemia y la proliferación de QAnon, las teorías conspirativas abundan este año y podrían influir en las decisiones de algunos votantes.
La diagnositico de coronavirus de Trump provocó las teorías conspirativas y rumores, muchos de ellos viniendo de la izquierda política.
Según el Centro de Investigación Pew, aproximadamente un mitad de los adultos en los EEUU han oído algo de QAnon, lo que afirma falsamente que Trump está luchando contra un red de traficantes del sexo integrado de miembros del elite democrático y un línea creciendo de personas famosas. La idea ha incitado las amenazas y la violencia, y el Bureau de Investigación Federal la nombró como una amenaza de terrorismo doméstico. En los meses recientes, los seguidores de QAnon han difundido la información errónea en grupos del web dedicados a luchar contra la trata de humanos o el abuso de niños y potencialmente les han influido a algunos votantes. Facebook anunció que removerá las cuentas, páginas, y grupos que promuevan la teoría conspirativa. Twitter eliminó 7,000 cuentas este verano, pero los investigadores dicen que 93,000 siguen en la plataforma.
Consejos: Aquí se puede utilizar muchos de los consejos previos. Además de la comprobación de datos, cabe señalar que las teorías conspirativas pueden proveer un sentido de pertenencia, según el investigador de la Universidad de Cambridge Thomas Roulet, y conectar con valores como la independencia y aún la búsqueda de la verdad, pero también podrían ser peligrosas. Podrían erosionar el discurso público, distraernos de las cuestiones reales y urgentes, y le hace más difícil a la gente obtener la información que necesita. Sería un punto de partida tener conversaciones con amigos y con familiares, situándose en los datos.
No sólo ocurre en Facebook y Twitter.
Unos investigadores de la Universidad de Nueva York predijeron al fin del último año que Instagram sería “el vehículo preferido” para la distribución de los memes engañosos y WhatsApp tendría un papel significativo en la difusión de la desinformación.
WhatsApp se ha convertido en una fuente de noticias importante para gente a través del mundo, según un informe que Reuters publicó este año. Los jóvenes en particular están confiando en Instagram y Snapchat para la información. Un estudio de la desinformación de Rusia en 2016 descubrió que los rusos tuvieron más éxito en Instagram que en Facebook. Las teorías conspirativas también han florecido en YouTube y TikTok, lo que está enfrentando un problema con la expresión de odio.
WhatsApp presenta unos desafíos especiales porque la información puede propagarse a través de las conversaciones privadas, donde la información errónea es más difícil identificar y monitorear. El impacto de la información errónea en el servicio y otros similares ha causado alarma en todo el mundo. Como Político observó en una historia sobre la información errónea que está circulando en las comunidades Latinas de Florida, WhatsApp es popular entre los inmigrantes y sus familias porque les permiten a los usuarios comunicarse desde todas las partes del mundo. Las organizaciones como Univision y un chequeador de datos turco que se llama Teyit han creado stickers que uno se puede enviar a los amigos y familiares para avisarles sobre la información errónea.
Las empresas tecnológicas se han vuelto más agresivas en sus enfoques en la información errónea. Facebook, que posee Instagram y WhatsApp, tiene asociaciones con comprobadores terceros y donó a una organización internacional de comprobadores de datos que combate la información errónea en las dos subsidiarias. También bajó el número de veces que un usuario puede compartir un mensaje de WhatsApp, cambiando este límite de 20 a 5. Finalmente, hay FactChat, el nuevo programa ya mencionado. Una semana después de su lanzamiento, el servicio tiene tres más usuarios que hablan español que los que hablan inglés.
YouTube y su empresa matriz, Google, también estaban lanzando unas pólizas para impedir la información errónea durante las elecciones, como Twitter y Facebook, donde se puede configurar su cuenta para priorizar los fuentes reputables. Este artículo de Vox incluye unos consejos para usar las configuraciones de estas dos plataformas para obtener la información más fiable en su feed.
Cómo ayudar a luchar contra la información errónea y desinformación
Lo bueno es que no necesita ser un chequeador de datos profesional para ayudar. Unos investigadores del Instituto de Tecnología de Massachusetts están aprendiendo que grupos pequeños de “gente normal” pueden ser tan eficaces como los comprobadores profesionales en descifrar el contenido falso en el web. Dicen que esta forma de colaboración ‘’ el crowdsourcing – podría ser una manera útil de ayudar en compartir la carga de responsabilidad.
En nivel individual, puede ayudar de manera más simple. Se recomienda pausar antes de compartir el contenido que incita una reacción emocional, como la ira, el asco, o el miedo, así como la esperanza o el entusiasmo, especialmente si la información corrobora su opinión. También es importante darles saber a otras personas, si puede, cuando comparten algo que es falso o engañoso.
Aquí hay un resumen de recursos para ayudar:
Fuentes de información sobre el proceso de votar:
La página de las elecciones de WITF
Los sitios y las páginas de chequeo de datos
El Detector por Univisión
Tverifica por Telemundo
The Washington Post’s Fact Checker
The New York Times’ Daily Distortions
Herramientas y el entretenimiento para reconocer las fuentes falsas o engañosas:
WITF & Trusting News: Defining Credibility & Trustworthiness in Journalism
Ad Fontes Media’s Media Bias Chart
Lista de sitios dudosos de “noticias locales”
Lista de fuentes falsas y engañosas y consejos para reconocerlos